Subscribe:

sábado, 18 de febrero de 2012

La roca y la Charca


Titulo original: The rock and the pool
Autor: Stephen Tall
Año de publicación: 1976
Género: Ciencia ficción
Editorial: Mosaico
Edición: 1977 en la publicación mensual "Espacio" número 4.
Vista Previa: No disponible
Calificación★ ★ ★

La roca y la charca nos sitúa en un mundo extraño, donde los humanos viven casi como animales. No cuestionan, ni intentan producir ningún cambio. Su existencia gira en torno a la comida y la bebida, proporcionadas por una gran roca y un profundo lago. Cada quien consume una cantidad suficiente para mantenerse vivo. Nadie se extiende más allá de lo conocido, pues no es necesario. Así transcurre la existencia de estas criaturas hasta que un día nace un joven que demostrará que esa extraña especie sigue siendo humana.

En adelante, es posible que te encuentres con spoilers. Si no has leído la novela y no deseas leer adelantos de la trama, no sigas leyendo.

La roca y la charca es una narración estupenda de Stephen Tall. Me sorprende que sea tan poco conocida (ni siquiera he podido encontrar una ilustración para poner en el blog). Apenas inicié la lectura, me sentí transportada al universo creado por el autor. Casi pude sentir las sensaciones de hambre y de sed descritas y en mi mente aún rondan imágenes del vasto desierto donde se hayan la Roca y la Charca .Talvez más de alguno encuentre engorrosa la excesiva descripción, pero creo que cuando se intenta recrear un mundo completamente desconocido, esta es necesaria.

Quise buscar una biografía del autor antes de hablar de su posible intencionalidad, pero está díficil. En español hay pocas referencias y lo poco que encontré en inglés era irrelevante para lo deseado. Pero gracias al año de publicación se pueden establecer algunas hipótesis.

Como muestra la información de más arriba, este cuento fue publicado en el año 1976. Es decir, cuando la amenaza atómica aún atormentaba a mucha gente. La roca y la charca refleja ese miedo, pero llegando al extremo: debido a explosiones atómicas, el ser humano ha vuelto a vivir en un estado primitivo. Y no sólo eso, sino que ha creado criaturas más poderosas. Estas criaturas observan como buenos científicos a los humanos, intentando descubrir como una especie tan patética fue algún día la dueña y señora del planeta.
Y parecen a punto de descubrirlo, pues el protagonista (el Alto, como se lo denomina) es el primero en cuestionarse su entorno y en quebrantar las normas. Su intensa curiosidad lo lleva a caminos inexplorados por el resto de pobladores. Con la muerte del más anciano de la comunidad, se marca el final de una era y el posible comienzo de otra mejor. Pero la ambición del Alto es tanta, que se logra percibir que tarde o temprano la comida y el agua escacearan debido al comportamiento irresponsable del joven. Justamente, esa es la historia de la humanidad. Siempre creemos que se está logrando un avance, algo para mejor, cuando muchas veces sólo estamos perjudicando aún más lo que queremos salvar.

Así, esta breve distopia nos enseña una lección que el género de la ficción científica está empeñado en impartir: los humanos debiéramos actuar con mayor cuidado y contemplación. Debemos detenernos a pensar en las posibles consecuencias de nuestros actos. Y que, incluso actuando de buena fe, podemos ser un verdadero elemento destructivo.

0 comentarios:

Publicar un comentario